RAÍCES QUE SE BAILAN: 22 DE AGOSTO DÍA MUNDIAL DEL FOLKLORE
Columna: PARA LA COMUNIDAD
Por: Fernanda Ileana Cueto Flores*
Cada 22 de agosto celebramos el Día Mundial del Folklore, una fecha con una historia tan fascinante como significativa, la palabra “folklore” nació en 1846 con el escritor inglés William John Thoms, cuando la utilizó por primera vez en la revista londinense “Atheneum”.
La palabra se conforma de la unión de dos vocablos ingleses: folk, que significa pueblo o gente y lore, que significa saber o conocimiento, el folklore es el saber del pueblo, la memoria viva que pasa de generación en generación.
Con el paso del tiempo el folklore dejó de verse solo como un conjunto de costumbres para convertirse en un campo de estudio y una verdadera memoria viva. En 1878 se fundó en Inglaterra la Folk-lore Society, la primera sociedad dedicada a investigarlo científicamente definiéndolo como “la supervivencia de las creencias y costumbres arcaicas en los tiempos modernos”, de esta forma, el folklore se volvió un puente que une lo antiguo con lo actual.
Desde entonces, esta palabra se convirtió en el nombre perfecto para describir aquello que nos conecta con nuestras raíces: los bailes, los cantos, creencias y costumbres que nos dan identidad, lejos de ser un recuerdo del pasado el folklore es una llama que sigue encendida en cada generación. Es la ciencia, pero también la magia de mantener vivas las tradiciones que hablan de quiénes somos.
«El talento de Atlacomulco reunido en una sonrisa: los integrantes del Ballet Folklórico Corazón Mestizo, orgullosos representantes de nuestra tradición«
Hoy, cada danza, cada canto y cada traje típico nos recuerda que el folklore no es pasado, es identidad y sigue latiendo en el presente. En Atlacomulco ese latido tiene nombre propio: Corazón Mestizo, grupo que ha hecho de la danza un mensaje para transmitir orgullo, tradición y comunidad, convirtiéndose en un referente local por su entrega, disciplina y pasión al transmitir las danzas folklóricas mexicanas, llevando la identidad en cada zapateado.
El nacimiento de Corazón Mestizo comenzó como un sueño de la directora del ballet folklórico la Licenciada en Danza, la Maestra Angela Priscila Rivera González, sueño que más tarde se convirtió en el inicio de un gran proyecto cultural que busca rescatar y difundir nuestras raíces, de la mano del apoyo y la buena guía para las juventudes atlacomulquenses, al otorgar las herramientas y conocimientos necesarios de nuestra cultura mexicana, reafirmando la capacidad que tienen los adolescentes de transmitir la cultura con entusiasmo y energía. Desde el principio de su historia, el grupo se ha mantenido como un espacio donde conviven el aprendizaje, la unión, la disciplina y, sobre todo, el amor por la cultura mexicana.
«El folklore hecho movimiento: cada baile es un homenaje vivo a México«
Los valores que transmite el grupo se ven reflejados en su nombre, el cual se pensó al querer representar dos cosas, el mestizaje de culturas y bailes que existen en México y la motivación detrás de la formación del grupo, siendo siempre la pasión por la cultura mexicana que yace del corazón de todos los jóvenes que integran este ballet.
Cada coreografía, cada presentación y cada faldeo cuenta una historia que lleva consigo la esencia de México y del ballet mexicano, para Corazón Mestizo la danza folklórica no es solo una disciplina artística, es una forma de vivir la identidad mexicana, a través del orgullo y la memoria colectiva, Corazón Mestizo te ofrece un viaje a todos los rincones de México a través de su danza con huapangos, redovas y polkas; este grupo logra difundir con amor y respeto la cultura que existe en todos nuestros Estados.
«El arte del faldeo, un lenguaje de gracia y fuerza que da vida a la danza mexicana«
Más allá de los escenarios y las presentaciones, Corazón Mestizo busca reflejar la pasión hacia la cultura de nuestro país, fortaleciendo los buenos valores como seres humanos en cada uno de sus bailarines, en un tiempo donde, cada vez se están perdiendo los valores esenciales como solidaridad, empatía, humanismo, respeto, unión, el grupo se convierte en un espacio para rescatar los valores y transmitirlos a las nuevas generaciones a través de la disciplina en cada ensayo, el respeto en cada convivencia y la unión en cada presentación.
El camino de Corazón Mestizo no se detiene, sigue creciendo, el grupo prepara dos grandes momentos que marcarán su historia, por un lado, su participación en un concurso nacional de danza en Puerto Vallarta, donde representarán con orgullo a Atlacomulco, llevando el folklore mexiquense a un escenario de talla nacional, demostrando que el talento atlacomulquense tiene la fuerza para brillar a nivel nacional.
«Cada escenario es una oportunidad para gritar con el movimiento el amor hacia nuestra cultura«
Por otro lado, reforzando su compromiso con difundir la danza folklórica, el ballet ya prepara “La Gala de Fin de Año”, un evento gratuito que presentará un gran repertorio con todo lo que han aprendido durante este año, desde cuadros llenos de tradición, hasta coreografías que transmiten la esencia del folklore con frescura y emoción reuniendo el esfuerzo, la disciplina y la pasión de cada alumno, ambos proyectos en puerta mantienen una misión en común: mantener vivo el folklore y compartirlo con nuevas generaciones.
Los alumnos de Corazón Mestizo son la prueba de que el folklore no solo se aprende, sino que se siente y transforma; para Lu Esquivel, cada ensayo es más que una práctica: es una aventura. Ella describe al ballet con palabras que lo definen como responsabilidad, compromiso, lealtad y amor, nos dice que en cada presentación encuentra un recordatorio de lo que puede lograr. La gala del año pasado fue para ella un momento inolvidable, ya que disfrutó lo que más le gusta hacer y, sobre todo, se sintió orgullosa de representar la esencia de ser mexicana frente al público.
Por su parte, Edson Sánchez habla con emoción de la unión que distingue al grupo, para él, bailar es mucho más que seguir un ritmo, es transmitir un legado cultural y compartir con el público la riqueza de México; orgullo, responsabilidad, entusiasmo y alegría son emociones que sintió desde su primera presentación dentro del grupo, demostrando que la identidad no solo se lleva en el corazón sino también en cada zapateado. Convencido de la importancia de mantener viva esta tradición, invita a más jóvenes a unirse, seguro de que en la danza encontrarán no solo una disciplina, sino también una familia.
«Corazón Mestizo: pasión, entrega y raíces que laten en cada paso«
Corazón Mestizo tiene claro que su misión: va mucho más allá de sus exposiciones, su fundadora nos comparte un mensaje poderoso a la comunidad atlacomulquense, nos menciona que el folklore no distingue edades ni géneros, es para todos, señala que los jóvenes como presente y futuro de México son quienes deben de abrazar y dar vida a las expresiones culturales, fungiendo como portavoces de nuestra cultura, asegurándose que el folklore no muera, que se disfrute y se celebre aquí, en Atlacomulco.
Ser parte de Corazón Mestizo es un orgullo y una responsabilidad, porque cada paso, cada ensayo y cada escenario es la oportunidad de gritar mediante el movimiento el amor hacia México. Lo mejor de este grupo es que siempre tiene los brazos abiertos para recibir a nuevos integrantes, actualmente los ensayos se realizan todos los domingos de 3:00 a 6:00 de la tarde en el Museo Histórico de Atlacomulco, gracias al apoyo invaluable del área de Cultura municipal y del Licenciado Fernando Ruiz Pérez, quien facilitó este espacio para que el talento local tenga un lugar digno donde crecer, el único requisito es tener pasión por la danza y la cultura mexicana.
Quienes deseen conocer más sobre esta comunidad artística pueden encontrarlos en Facebook, Instagram y TikTok como “Ballet Folclórico Corazón Mestizo”, y descubrir que, más que un grupo de danza, son un proyecto que late al ritmo de México. Porque aquí en Atlacomulco todo lo que se hace, se hace con el corazón, un Corazón Mestizo.