Por José Mario de la Garza Marroquín*

La censura avanza en México. Lo que antes era indignación por la represión, hoy se normaliza con discursos de “lenguaje correcto”, “violencia política” o “control del odio”. Pero detrás de las palabras suaves, hay castigo, silenciamiento y miedo. 

Aquí documentamos los principales actos recientes de censura en México. Uno por uno. Que quede constancia. 

1. Sanción a ciudadana por opinar en redes Karla Estrella, ama de casa, fue multada, obligada a disculparse 30 días seguidos y registrada como agresora política por criticar un presunto caso de nepotismo en Morena. Su pecado: publicar un tuit que decía “cero pruebas, cero dudas”. 

2. Denuncia contra Laisha Wilkins por apodo crítico. La actriz llamó “Dora la censuradora” a una excandidata a ministra. El Tribunal Electoral abrió procedimiento por “violencia política de género”. La sátira empieza a ser delito. 

3. Prohibición de ejercer periodismo en Campeche. Una jueza local, a petición de la gobernadora Layda Sansores, cerró el periódico Tribuna y prohibió al exdirector ejercer como periodista por 2 años. Censura judicial con sello de autor. 

4. Ley de censura digital en Puebla Reforma penal aprobada: ahora insultar “reiteradamente” en redes puede castigarse hasta con 3 años de cárcel. ¿Criticas al poder? Te vas a prisión. 

5. Iniciativa penal en Sinaloa por “daño emocional”. Una diputada de Morena propuso cárcel por publicaciones que “denigren o causen daño emocional”. La iniciativa fue retirada, pero la intención quedó clara. 

6. Ley de Telecomunicaciones con dientes de censura. En abril 2025 se intentó aprobar una ley que permitiría bloquear plataformas digitales sin orden judicial. La sociedad civil la detuvo, pero el riesgo permanece. 

7. Prohibiciones contra corridos en varios estados. Guanajuato, Jalisco y otros han prohibido conciertos o canciones “narcoculturales”. La música también se censura, si incomoda al discurso oficial. 

8. Suspensión judicial de exposiciones artísticas. Obras del artista Fabián Cháirez fueron retiradas en la UNAM y CDMX por órdenes judiciales. El arte queer sigue siendo incómodo para el conservadurismo institucional. 

9. Litigios para callar medios. Casos como el del Dr. Jesús Luján, que buscó impedir que la prensa cubriera denuncias sobre malas prácticas médicas, revelan el uso de demandas para intimidar periodistas. Censura por vía judicial. 

10. Amenazas y troles contra periodistas. Reporteras como Azucena Uresti enfrentan amenazas, acoso y campañas de odio. El mensaje es claro: si incomodas, te callamos por miedo. 

11. Censura algorítmica a colectivos feministas. Meta suspendió cuentas de organizaciones que informan sobre aborto seguro. La automatización de la censura digital ya afecta a causas legítimas.  

Documentar es resistir. Nombrar cada acto de censura es romper el silencio que el poder quiere imponer. Si la libertad de expresión muere en pedacitos, hoy toca defender cada palabra.

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