Por Arturo Allende González*
Expongo en el presente artículo algunas consideraciones de porqué es relevante que Gabriela Ramos Patiño, diplomática mexicana, nacida en el Estado de Michoacán, sea una de las prospectas a ocupar la Dirección General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

En casi 80 años de existencia (16 de noviembre de 1945), la UNESCO, sólo ha sido dirigida por un latinoamericano, por el eminente diplomático, escritor y poeta mexicano, doctor Jaime Torres Bodet (de 1948 a 1952). A 77 años de distancia, nuevamente una talentosa y experimentada diplomática mexicana aspira a la Dirección General del prestigiado organismo de Naciones Unidas, concebido para promover la paz y la solidaridad intelectual entre las naciones tras las devastadoras consecuencias de la Segunda Guerra Mundial. La UNESCO tiene como objetivo contribuir a la paz y a la seguridad en el mundo mediante la educación, la ciencia, la cultura y las comunicaciones.
El otro aspecto a destacar, tiene que ver con que sea una mujer mexicana la que aspire a tan honrosa elección. Lo anterior se enmarca en el indiscutible avance que las mujeres en nuestro país, han logrado a base de esfuerzo, trabajo, talento e imaginación, así como a una larga y perseverante lucha por la igualdad en general entre hombres y mujeres y en particular, por la igualdad de oportunidades para ocupar cargos en la esfera política; empoderamiento que trasciende hoy las fronteras nacionales y se hace presente en el contexto internacional.

Gabriela Ramos ha sido postulada por el Gobierno de México para dirigir la UNESCO y éstas son algunas de las credenciales que sustentan su postulación:
Estudió relaciones internacionales en la Universidad Iberoamericana y una maestría en políticas públicas en la Escuela Harvard Kennedy.
Diplomática con una larga experiencia en instituciones internacionales como la UNESCO y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), así como en foros económicos como el G20 y el G7.
En 2020 fue nombrada Subdirectora General de Ciencias Sociales y Humanas de la UNESCO. En ese cargo logró la redacción y adopción de la Recomendación sobre la Ética de la Inteligencia Artificial en 2021, que planteó directrices éticas para el desarrollo de la IA.

Entre sus logros como funcionaria de la UNESCO, destacan los siguientes:
- Lideró la adopción de la Recomendación sobre la Ética de la Inteligencia Artificial de la UNESCO.
- Organizó el Foro Global contra el Racismo y la Discriminación.
- Impulsó la creación de la Coalición MOST-BRIDGESde la UNESCO.
- Integrante del Comité Directivo del Foro de París sobre la Paz.
- Integrante de la Comisión Lancet Covid-19 y de la Comisión Lancet sobre la Violencia de Género.
- En su desempeño, se esfuerza en garantizar que los avances científicos y tecnológicos se alineen con estándares éticos y equidad global.
Otros cargos desempeñados:
- Miembro del Comité Directivo de la organización Paris Peace Forum
- Miembro del Consejo Ejecutivo para la Igualdad de Género del G7 (GEAC).

Distinciones y condecoraciones:
- En 2013, fue condecorada por el presidente francés François Hollande como miembro de la Orden del Mérito en grado de Chevalier.
- Se le concedió el Premio Forbes a la Excelencia en la Gestión de 2017 y también fue incluida en la lista de las 100 personas más influyentes en política de género de Apolitical.
- En 2021 fue considerada como una «agente de cambio excepcional»
- En 2024 fue galardonada con el premio de líder en políticas de IA del Center for AI and Digital Policy.
- Fue finalista del Premio Mujer de Influencia 2024 en la categoría de política.
En la declaración de principios que enarbola, destaca lo siguiente.
- «Mi estrategia para el éxito se resume en estas tres ‘íes’: inclusión, innovación e impacto«.
- En un mundo sumido «en tiempos inciertos y muy complejos«, donde «el conflicto gana espacios«, es imprescindible «construir puentes, entablar diálogos y buscar soluciones«.
- Se pronuncia y defiende una UNESCO “más fuerte, más inclusiva y más innovadora”, en un momento difícil “marcado por la ruptura progresiva del sistema internacional y la pérdida de confianza en el multilateralismo”, dentro de una “época de conflictos y de polarización”.
El proceso de elección del Director o Directora General de la UNESCO, se llevará a cabo en el mes de octubre de 2025, mediante una votación secreta de los 58 países miembros, nombrados para integrar el Consejo Ejecutivo, un mes después, la Conferencia General de la UNESCO -integrada por todos los países miembros-, es la encargada de nombrar al Director General de la Organización.

A 80 años de distancia, algunos de los postulados que se expusieron en la Conferencia constitutiva de la UNESCO en Londres Inglaterra, siguen siendo válidos y susceptibles de ser escuchados por los Jefes de Estado y de Gobierno en general y por los líderes mundiales en particular.
- Afirmar la cooperación mundial por medio de la educación, la ciencia y la cultura.
- En gran parte, la guerra es siempre el producto extremo de una insuficiencia o de una deformación lamentable de los sistemas educativos de las naciones.
- El programa de la UNESCO, seguirá tropezando -como hasta ahora- con incontables obstáculos económicos, políticos, jurídicos, sentimentales y culturales.
- Cuanto más convencidos estemos de la importancia de la alta cultura, más habremos de interesarnos por hacerla llegar a extensiones cada día mayores de toda la población.
El importante papel de la educación, la ciencia y la cultura para contribuir a la paz y a la seguridad de las naciones, “no será posible en un mundo en el que siguen privando los abusos imperialistas, la ley del más fuerte y, bajo formas disimuladas, el orgullo arbitrario de las potencias y los prejuicios de las razas que se creen o se dicen superiores”.
Los desafíos que enfrenta hoy la UNESCO, son enormes, la candidatura de Gabriela Ramos, una esperanza latinoamericana para superarlos.
CONTACTO FB: https://web.facebook.com/arturo.allendegonzalez





